Los comienzos de mi embarazo

Hoy te quiero contar cómo me enteré que estaba embarazada, porque no sé si es que yo soy muy cortita, pero no lo tuve tan claro desde el primer momento como la gente dice y quizá, algún día te suceda lo mismo y leer cómo lo viví yo te ayuda a estar segura un poco antes.

Hacía tiempo que quería quedarme embarazada, aproximadamente un año antes de buscarlo, pero mi chico no lo tenía tan claro así que, aunque yo dejé de tomar la píldora la mayoría de las veces usábamos preservativo. En junio de 2014, anda que no suena ya lejos, él me dijo que ya no le importaría que empezáramos a buscar, en ese momento yo me descargué una aplicación para el móvil de esas que metes tus datos y te da los mejores días. 

Un par de semanas, más o menos, después de tomar la decisión, el móvil me dijo que era un buen momento, nos íbamos de vacaciones un par de semanas después, así que le busqué y le dije que tenía que preñarme que sino íbamos a tener compañía indeseable en las vacaciones (lo sé, soy de lo máaaas romántica, que le vamos a hacer).

Nos fuimos de vacaciones y nosotros somos de los que no paran, estuvimos recorriendo la Costa Brava, que te recomiendo que visites si no la conoces, porque es precioooooosa.

4 ó 5 días antes de la fecha en la que me tocaba recibir a mi prima empezó a dolerme la barriga y el pecho; es decir; lo mismo que todos los meses. Seguimos con las vacas, este año nos dio por hacer snorkel; aunque debo reconocer que yo soy de secano, que necesito ver el mar cada poco tiempo pero para nada necesito meterme en él. Vamos, que todo este rollo es para explicarte que mi ritmo no era el habitual, así que cuanto llegó el día que tenía que venir y no llegó, pues no me extrañé.

Empecé a levantarme al baño cada noche en el hotel, menudo tostón, pero mi mente inmediatamente lo achacó al hecho de estar con el bikini mojado todos los días. Con los dolores premenstruales que tenía era imposible pensar en otra cosa.

Abandonamos la Costa Brava para ir a la tierruca, llegamos a Cantabria y seguimos haciendo horas de playa y snorkel, igual no pasaba tanto tiempo en la playa desde mis 14 añitos, pero el plan con los amigos surgió así. Un día hasta me puse la copa menstrual para bajar a la playa, porque con todo lo que me dolía era imposible que pasara de ese día, pero tampoco llegó.

La verdad es que en ese momento ya me planteaba en algún momento que podía estar embarazada, pero te juro que con los dolores que tenía y teniendo en cuenta que sólo había habido un intento, lo descartaba rápido.

Después de 2 jornadas completas de playa, se fueron nuestros amigos y el tiempo se torció un poco, con lo que pasamos a más ratos de paseos, bares y tiendas. Empecé a sentirme agotada, pero literalmente, mi chico me decía que no habíamos hecho nada para que me encontrara así y yo le respondía que siempre le había dicho que la playa me cansaba y que llevábamos 2 días hasta comiendo en la arena. Pero bueno, ese día era nuestro aniversario de boda y por muy cansada que estuviera no podíamos dejar de celebrarlo. 

Nos fuimos a tomar un par de vinitos y después de cenita rica. Entre el cansancio y los 2 vinos no me encontraba muy bien, pero aún así me sorprendió que justo cuando acababa de cenar (no recuerdo exactamente que pedí, pero de segundo me estaba comiendo un pescado con langostinos que estaba buenísimo) el último langostino me provocó nauseas. Pero no, no te creas aún que pensé en embarazo, se lo achaqué al cansancio y a los 2 vinitos. Por cierto, el dolor de barriga continuaba.

Al día siguiente mi madre me preguntó si estaba embarazada, que ese día me veía la barriga más de embarazada que de gorda, que supongo que ya lo sepas pero muchos vinitos y tapas están de morirse, pero engordan, y yo llevaba meses saliendo a tomar algo a diario después de trabajar. Respondí que no lo estaba pero ya sí me quedé dándolo vueltas. Llevaba 9 días de retraso, era sábado y el lunes volvía a currar.

Esa noche hablé con mi chico y me dijo que el lunes en Burgos ya me haría la prueba, me quedé así y le dije que mejor al día siguiente, que no quería hacerme la prueba y a continuación irme a trabajar cuando podíamos aprovechar a hacérmela y asumir la respuesta en un día de descanso.

Y así fue, al día siguiente pasamos por la farmacia y sorpresa, positivo!!!

A partir de ese día decirte que nunca volví a tener nauseas y que el cansancio excesivo solo duró esos 2 días, lo de levantarme al baño sí se siguió manteniendo y tuve dolores de regla durante aproximadamente un mes. Fueron 7 meses de embarazo increíbles, mi cuerpo fue creciendo pero sin quejarse más que en momentos puntuales, a partir del séptimo mes ya se empezó a torcer, principalmente porque me diagnosticaron diabetes gestacional y la dieta y los controles de glucosa me matan, pero tampoco nada que no se pueda soportar, con lo que no debo quejarme porque estoy teniendo un embarazo perfecto.
Si andas como loca buscando sujetadores de lactancia en tallas grandes, no lo dudes, en GranLenceria.es los tienes.